miércoles, 31 de julio de 2013

#NOaLaReformaLocal


MIÉRCOLES, 31 DE JULIO DE 2013

ÓSCAR RUIZ GONZÁLEZ Sígueme 

Un golpe de estado contra del municipalismo y la autonomía de los ayuntamientos, en beneficio de bancos y empresas. Así gobierna la derecha en nuestro país, ya poco o nada nos sorprende de este grupo de nostálgicos del pasado que pretenden hacer realidad sus anhelos cabalgando a lomos de una mayoría absoluta conseguida mediante mentira, engaño, manipulación y falsas esperanzas.

Las miradas se centran ahora en el más que posible recurso de inconstitucionalidad que los socialistas presentarán ante el Tribunal Constitucional una vez que la ley sea aprobada, aunque visto lo visto, no sabe uno que es peor, si la ley en sí, o que el presidente del tribunal que debe decidir sobre la constitucionalidad de la norma sea militante activo del partido Popular.

 Nuestro país es un chiste, con un gobierno más propio de “monarquía bananera” que de un estado social y de derecho como siempre nos han dicho que era España (a otro loco con ese cuento).

 La sanidad, la educación, todo lo considerado insignia de la democracia para nuestro país ha sido saqueado, exterminado, aniquilado o transformado en “pseudo derechos” que solo benefician a los sectores adinerados de una sociedad mayoritariamente empobrecida y desesperada que observa impotente como su gobierno les roba todo aquello por lo que han luchado. Como era de esperar, la tijera de la derecha más rastrera que ha conocido nuestro país llega a los ayuntamientos y arrasa a su paso con la unidad básica de un sistema democrático: el municipio.

 Nuestros país en manos del capitalismo enfurecido, y ahora nuestros pueblos, que son vistos por las grandes empresas como oportunidades de negocio en perjuicio de los derechos de todos los que los habitamos, que miraremos y veremos, una vez con impotencia, como todo será privatizado y como ya mismo nos cobrarán hasta por respirar ¡una vergüenza y un despropósito!

Me pregunto yo si esta reforma no es más que un instrumento para satisfacer a los donantes del PP que luego irán apareciendo en papeles o contabilidades ocultas. Que mejor manera de tener contenta a la gran empresa que “suelta el billete” que poniéndole en bandeja la explotación de los servicios públicos de los 8116 municipios que forman España.

 Ya lo decía Mario Jiménez recientemente "La ley que ellos llaman de reforma local exuda el olor de Bárcenas. Esta ley huele a Bárcenas, es una ley pensada para que ciertos donantes reciban su premio, para que ciertos donantes terminen quedándose con los servicios públicos esenciales que, en manos privadas, son negocios miles de millonarios"

 Que Dios nos pille confesados con la que se nos viene encima…

DIARIO PROGRESISTA