lunes, 27 de enero de 2014

Todos roban

LUNES, 27 DE ENERO DE 2014
PABLO IGLESIAS
La prensa y los partidos burgueses, afectando una honradez de que carecen, vienen ocupándose hace mucho tiempo, ante los repetidos desfalcos que se llevan a cabo en la Administración pública, de la necesidad de moralizar ésta.
Sin embargo, suben al Poder los conservadores y nada hacen de tanto como dicen; suben los izquierdistas, y los desfalcos continúan; gobierna el fusionismo, y los robos e irregularidades (como han dado en decir aquellos a quienes duele llamar ladrones a los que visten de frac o levita) aumentan extraordinariamente. Y lo mismo que éstos harán los demás partidos burgueses que no han logrado salir aún de la antesala del Poder, es decir, de las filas oposicionistas.
¿Cómo tomar en serio esos pujos de moralidad de unos y otros elementos burgueses, cuando la clase que actualmente domina se mantiene del robo y con el robo se enriquece?
¿Cómo han de proceder los Gobiernos contra quienes realizan desfalcos de importancia, si los individuos que forman parte de ellos, a más de ser los servidores de una clase que lo debe todo a la rapiña, tratan también de hacer lo que pueden, y unas veces legalmente y otras con apariencia de legalidad, cobran sus servicios improvisando fortunas escandalosas?
El Banco de España, el de la Habana, el Hipotecario, la Compañía Transatlántica, la de Tabacos, las de ferrocarriles y otros establecimientos de crédito por el estilo, ¿qué representan?, ¿qué son? Pues cuevas y nada más que cuevas de bandidos, donde se trama el modo mejor de desvalijar por completo a la clase productora y a los ladronzuelos que roban a ésta al por menor.
Y no hablemos de la Bolsa, de ese sitio donde se cotizan valores y que con sobrada razón pudiéramos llamar Centro o plaza de la flor y nata de los ladrones, pues allí van a quitarse unos a otros, apelando a toda clase de engaños, mentiras y estratagemas, lo que antes han arrebatado por medio de la violencia la pueblo productor.
Además, ¿qué le importa a la clase capitalista que sus servidores metan de cuando en cuando la mano en las arcas públicas? ¿Qué significa para ella la desaparición de unos cuantos millones? Sean sus abogados y defensores listos; sepan sujetar bien los brazos a la masa obrera para que no puedan rechazar el constante despojo que se le hace del fruto de su trabajo; métanla en cintura cuando, acosada por el hambre, pida algo de lo suyo, y aunque por ese servicio cobren o tomen los gobernantes una buena cantidad, a la burguesía no le dará cuidado. Pásale en esto a la clase poseyente lo que al patrono con los capataces o encargados de las fábricas: nada le importa darles buenos salarios y tolerarles infinidad de chanchullos, con tal que ellos obliguen a los obreros que están a sus órdenes a dejar en beneficio del industrial la mayor parte de su trabajo.
Por otra parte, si la clase explotadora vive, como ella misma dice, del negocio –hablando con propiedad, del robo- ynegocia con el hambre, la honra y la vida de los trabajadores, ¿por qué sus servidores (ministros, gobernadores, generales, etc, etc.) no han de negociar también vendiendo destinos, tomando parte en empresas representados por otros individuos, o procurando “desinteresadamente” que tal o cual contrato se conceda a ésta o a la otra Compañía? ¿Por qué, asimismo, los empleados que no ocupan puestos elevados, y por lo mismo les es difícil “negociar” sin correr riesgo alguno, no han de llevarse por delante, al presentárseles coyuntura, las cantidades que se les confían o parte de ellas? La moral burguesa, basada en la apropiación del trabajo ajeno, en la expoliación de los productores, debe ser igual para todos los que, de un modo o de otro, figuran en las filas de la clase parásita. Además, la ley escrita que condena a los que roban fuera del medio que ella permite es letra muerta si la cantidad robada es de cuantía o el que se la ha llevado dispone de recomendaciones o influencias.
Sería, pues, incomprensible que una clase compuesta toda –desde el tendero de comestibles y el industrial que explota a algunos obreros hasta el capitalista, incluyendo en ella también la alta burocracia-de gentes que viven del trabajo de los demás, quisiera impedir el robo y los desfalcos en la administración de sus servicios. Cuando más, lo que hará, y lo que hace, es castigar a los pequeños empleados que distraigan alguna cantidad insignificante; pero a los gordos, a los poderosos, jamás.
Quién extirpará de veras ese vicio social; quien logrará concluir con todos los ladrones, grandes, medianos y pequeños, y con sus auxiliares, es la clase robada, la clase a quien todos ellos han despojado un día y otro día de lo que con su esfuerzo ha producido: la clase trabajadora.
Pero esto lo conseguirá, no manteniendo en pie el actual orden de cosas, sino barriendo por completo las instituciones burguesas y estableciendo en su lugar un régimen social en que el consumidor, salvo en los casos de imposibilidad física, sea al mismo tiempo productor.
Así no podrá haber ni ladrones ni robados.
(El Socialista, número 94, 23-XII-1887, p.2)
DIARIO PROGRESISTA

sábado, 25 de enero de 2014

DIAS DE ESCUELA

Por Francisco Parra
“Bien abrigado, llegaba al colegio, mil novecientos sesenta, hace poco tiempo…”, canta el vocalista de asfalto, el grupo actúa algo incómodo en un pequeño escenario improvisado en una discoteca rural que tiene más apariencia de salón de baile que de discoteca, al fondo los paisanos escuchan el rasgueo de guitarras eléctricas y el tum tum del baterista “.. formados ante una cruz y a ciertos retratos….”, los músicos acostumbrados a los teatros de los colegios mayores de Madrid, a las amplias campas de los conciertos estivales que empiezan a proliferar en la España que estrena democracia y libertad, o a los selectas salas de conciertos de las capitales a los que acude una muchedumbre de entregados, que no paran de bailar imitando a los guitarristas, punteando en guitarras imaginadas, se van dando cuenta de lo efímera que resulta la fama, desplazados por la movida madrileña, los rockeros apuran los últimos réditos de sus pasados éxitos, actuando para un público en su mayoría indiferente, en el que apenas unos pocos pulsan su imaginario instrumento…. “…entre bostezo y bostezo, gloriosos himnos pesados…” prosigue el cantante con su tonada.
Entre ese público diríamos más actual, hay alguien que evoca su escuela tan parecida a aquella que el compositor ha versado, “ … despertamos en pupitres de dos en dos, aún recuerdo el estrecho bigote de Don Ramón… ”- retumba la música lo largo de la sala de baile. Don Ramón o Don Antonio, que más da, también con su estrecho bigote, su cara angulosa y pelo abrillantado por la gomina, facha agitanada , voz bronca, y mano larga, enhiesto y siempre con el cigarro en la mano, dictando las tablas de multiplicar, dos por uno, dos, dos por dos, cuatro,…era el director de aquella escuela rural con aires capitalinos, construida en la república, de ladrillo rojo, amplios ventanales y aspecto modernista, tenía dos plantas para separar conveniente la instrucción de niños y niñas”.. la estufa de carbón frente al profesor, la dichosa estufa que no calienta ni a Dios..” – resuena la canción. Frente a la entrada un patio delantero colmado de plataneras que habrían sus ramas para dar mejor sombra, fruto sin duda de los buenos oficios de algún bedel que debió tomarle el gusto a la jardinería, el patio de atrás ralo era campo gimnástico, aquella escuela que debió ser limpia y alegre en su momento, estaba dejada de la mano de dios, gris, sucia, desconchada y con unos servicios tan malolientes que las necesidades se hacía a uno de los costados del edificio, allí crecía la mala yerba abonada por los orines y cacas de los muchachos. Jardineras en donde antaño crecía la caléndula, eran pasto de ortigas y cardos. Integradas en el patio se habían construido viviendas en planta baja para los maestros , con jardincillos en donde crecían rosales, lilas, begonias , margaritas y calendulas.
“…Suena el timbre ¡Al Fin!, bocadillo, recreo, ¡Qué pasión!...”, “Una tortura más, antes del juego, la leche en polvo y el queso americano…” – ahora la guitarra y el bajo quitan protagonismo al vocalista. Que poco nos gustaba aquella leche, los que podíamos llevábamos envuelto en papel unos gramos de “colacao” para digerir el presente del amigo americano, a la escuela se iba jugando, chascando cantos rodados, uno tiraba el pedrusco y otro había de acertar y por mor de la física desplazarlo algunos centímetros hacía atrás, el primer tirador recogía su guijarro y guiñando el ojo hacía puntería para acertar al canto del otro tirador, al final siempre había que correr porque se hacía tarde y la puerta de la escuela quedaba cerrada a cal y canto. En el recreo se jugaba al abrigo de las plataneras con la peonza, las canicas, las bolas de rodamiento y las chapas. Liberados del temor que infundía el magisterio, en el patio se avivaba la imaginación para lo malo y para lo bueno, surgían así las bravatas más groseras, junto a las rifas en las que nos desprendíamos de canicas, cromos, indios y vaqueros, con la ayuda del papel de la suerte, cuyas caras interiores convenientemente coloreadas daban cuenta de la jerarquía del premio, o los mercados de estampas recortadas de cajas de cerillas, cuya cara se adornaba con litografías de animales, flores, toreros, loza, etc….”…sales Sales tú y el gordo después, te cambio los cromos, te juego al tacón.” …”…Sabes tú, la ligo yo, apuremos el tiempo que ya nos meten dentro,,,,” . “Yeahh..” – grita al cantante.
Maestros como en botica, de todo había en la escuela, buenos y malos, estirados y cariñosos, laxos y severos, y alguno hasta impedido de ejercer su magisterio por antiguas rebeldías, lo cierto es que la memoria de un niño solo recoge los buenos recuerdos, los de Don Julián que premiaba la aplicación enseñando en la salita de estar de una de aquellas viviendas en donde aún crecía la caléndula, los libros de Salvat con esplendidas fotografías la fauna ibérica o selvática, ó don Ricardo que premiaba el cuaderno de deberes más airoso, en el que cabía el dibujo, el recorte de revista y el poema. ¡Hay las bravuconadas que nos llevaron a querer ser hombres apurando las colillas que encontrábamos por el suelo!. Con cuánta razón uso aquella vez Don Ricardo la vara de fresno para que entendiéramos que el tabaco no solo era malo para la salud, sino que apurar la colilla de algún achacoso podría causarnos algún mal mayor.
“… Dos horas de catecismo y en Mayo la comunión. La letra con sangre entra, otro capón,…”- vuelve a oírse al cantante con su tonada. El cura todos los lunes daba la religión, y preguntaba de que iba el sermón del domingo, siempre a aquellos que no había ido a misa o los que habiendo ido habían estado distraídos, bien lo sabía el ya que niños y niñas en misa siempre ocupaban las primeras bancadas de la iglesia, a la derecha del párroco los hombres a la izquierda las mujeres. Los lunes el capón era seguro. Mayo, el mes de las flores y los altarcitos para la virgen, era la única vez en que los chicos subíamos hasta la planta de las chicas, solo para rezar juntos el rosario. Los recreos siempre a horas distintas. Ascender aquellas escaleras en otro momento, era pena de muerte segura… “…tarea para mañana y puesto el abrigo, otra copla a los del cuadro y hasta mañana Don Ramón…”….Hasta mañana Don Ramón o quizás hasta después, pues los magros sueldos requerían de permanencias que abonaban las familias que podían.
El sonido de la banda es poderoso, limpio, entre rock y pop, sin duda son buenos músicos, actuando con profesionalidad incluso para un público para nada entregado…, “ Y ahora tú, qué pensarás, si cuando más me oprimían, más amé la libertad…y es a ti a quién canto hoy,…enseña a tu hijo, oooohhhhh enseña a tu hijo a amar, laaaa,,,,,,, libertad”.

El vinilo de Chapa-discos ha dejado de sonar, y el final de la canción me ha devuelto a la realidad de este cuartucho trastero al que de cuando en cuando bajo a escuchar música de los años ochenta, es una aparato destartalado y remendado cuyo tiempo se contará por el que dure la aguja de su brazo que ya parece ir teniendo el tiempo contado, sin duda cuarenta años de servicio ya es mucho tiempo para un electrodoméstico. Subo a casa a leer el periódico: el dichoso paro que no mengua, los recortes, a vueltas con la ley Wert, la reforma de la ley del aborto,..he puesto la televisión y por la uno ponen la homilía de Cañizares en el día de la familia….la apago y salgo a la ventana a airearme, miro lejos, agudizo mi vista de miope todo lo que puedo y en el horizonte alcanzo a ver ajado el jardincillo en donde Don Julián plantaba las pocas caléndulas que aún crecían en la escuela del pueblo.

DIAS DE ESCUELA

Bien abrigado llegaba al colegio,
1960 hace poco tiempo.
Formados frente a una cruz
y a ciertos retratos
ente bostezo y bostezo,
gloriosos himnos pesados.
Despertamos en pupitres de dos en dos,
aún recuerdo el estrecho bigote de Don Ramón,
y la estufa de carbón frente al profesor,
la dichosa estufa que no calienta ni a Dios.

Suena el timbre, ¡Al fín!
bocadillo, recreo, ¡Qué pasión!
Una tortura más, antes del juego,
la leche en polvo y el queso americano.

Sales tú y el gordo después,
te cambio los cromos, te juego al tacón.
Sabes tú, la ligo yo,
apuremos el tiempo que ya nos meten dentro.

Yeahh...

Dos horas de catecismo y en Mayo la comunión.
La letra con sangre entra, otro capón,
tarea para mañana y puesto el abrigo,
otra copla a los del cuadro y hasta mañana Don Ramón.
Y ahora tú, qué pensarás,
si cuando más me oprimian, más amé la libertad
y es a tí a quién canto hoy,
enseña a tu hijo, oooohhhhh enseña a tu hijo
a amar, la libertad

miércoles, 22 de enero de 2014

Siete falacias

MIÉRCOLES, 22 DE ENERO DE 2014
ANTONIO MIGUEL CARMONA
Una falacia es un argumento que parece válido pero no lo es. Repiten sin cesar Mariano Rajoy y Soraya Sáenz de Santamaría los trece tipos de falacias de Aristóteles de los que extraeré sólo una escogida selección.
Primera falacia: “es la primera vez que hemos conseguido que disminuya el desempleo en España a partir de cifras muy bajas de crecimiento”. Esconden que el descenso del desempleo obedece a la salida de población activa, a la baja de registrados, la salida del país de jóvenes, el desánimo de cientos de desempleados.
Segunda falacia: “hemos conseguido disminuir la prima de riesgo”. Ocultan premeditadamente que la prima de riesgo ha descendido en todos los países por la actuación directa del Banco Central Europeo desde septiembre de 2012.
Tercera falacia: “hemos logrado salir de la crisis”. Sin señalar que la vuelta a cifras positivas de crecimiento –donde las dejó Zapatero-, se debe al incremento de las economías europeas y que la política económica de Rajoy ha supuesto un lastre originado por la subida de impuestos a las clases medias y los recortes de gasto a los más necesitados, llevando por ello al consumo a su hundimiento.
Cuarta falacia: “hemos conseguido que España no fuera rescatada”. En primer lugar, muy al contrario de lo que se dice, el sistema bancario español tuvo que ser rescatado. La causa fue la reforma financiera de Luis de Guindos en mayo de 2012, norma que provocó una estampida de capitales y la actuación inmediata de la troika para salvar nuestro sistema financiero.
Quinta falacia: “la luz ha disminuido en España durante el último año”. Las sucesivas subidas suman acumuladamente un incremento en la factura de los españoles sin antecedentes tan agresivos a nuestros bolsillos.
Sexta falacia: “los salarios en España no han disminuido”. Falsedad que el propio INE se ocupó de desmentir horas después de que Montoro expusiera tamaña falsedad, notoria impostura, mentira tan grande.
Séptima falacia: “sostendremos el poder adquisitivo de las pensiones”. Báñez aprobó que sólo subirían un 0,25%, con una inflación que será cuatro veces superior. Es como para que se nos ponga cara de tontos a todos los españoles.
Descansaremos de tanta falacia porque, créanme, hay más. Un lugar para recordar que los españoles somos víctimas de aquellos que nos gobiernan porque éstos creen sencillamente que les creemos.
@AntonioMiguelC
DIARIO PROGRESISTA

domingo, 12 de enero de 2014

El desmantelamiento de la Democracia en dos años

DOMINGO, 12 DE ENERO DE 2014
ALEJANDRO ESPÍ
Los herederos del franquismo ya están aquí, bien lo sabemos. Aquellos que se vanagloriaban de centristas, moderados y otra serie de infundios con los que pretendían echar un velo que ocultara su creencia, sentir e ideología, no han podido evitar mostrar su rancio raciocinio en cuanto en sus manos estaba la toma de decisiones.
Decía Jean-Paul Sartre que el fascismo no es definido por el número de sus víctimas, sino por la manera en que les mata. Extrapolando a la actual democracia con el tufo dictatorial del Gobierno del Partido Popular, podríamos adaptar la afirmación a que el fascismo no es definido por el número asesinatos, sino por el fusilamiento de los derechos y libertades democráticas de los ciudadanos, sin tapujos ni desazones.
Con esta derecha insensible y capaz de todo, España está inmersa en un proceso continuado de retorno a la época más oscura y miserable de nuestra historia reciente. Ello enmascarado en lo que denominan “el mayor proceso reformista de la democracia”, que realmente esconde una vuelta atrás. Proceso donde la crisis es el marco y la escusa perfecta para desmontar paulatinamente algo en lo que nunca creyeron: un estado democrático, de derecho y de bienestar asentado en la igualdad ciudadana, la libertad y los derechos humanos. Y sino, lean con atención y recuerden atentamente, cada una de las decisiones de este gobierno desalmado, entenderán el porqué.
La educación es el pilar base de toda sociedad, también de aquellas adoctrinadas y embaucadas bajo unos valores deplorables. Ellos nos ofrecen la LOMCE, su ley de educación, que de entrada contaba y cuenta con el rechazo de toda la comunidad educativa. Con esta Ley, que perfectamente podría llamarse Ley de Ordeno y Mando de la Conferencia Episcopal, la religión vuelve a la cúspide, se premia a los colegios que disgreguen por sexos, se elimina la educación para la ciudadanía que educa en valores cívicos y sociales e introducen reválidas para ir eliminando del sistema a los que necesitan un poco más de apoyo.
Que nuca creyeron en la igualdad de oportunidades siempre lo supimos. Ahora, lo lamentamos. Han recortado cientos de millones de euros en educación, desmantelando por completo el sistema de becas a la par que han subido las tasas universitarias. Consiguen con esto que estudie quien pueda pagárselo, un principio sustancial en una mente arcaica. Todo ello un símil con la educación en tiempos de la España negra. El fin supremo; volver a entregar a la religión el negocio de la educación para educar en el catolicismo.
Los derechos laborales han sido otra máxima a liquidar por este Gobierno de dudoso sentir democrático. Con su perversa reforma laboral, abarataron el despedido, precarizaron el mercado laboral, y han reventado el convenio colectivo, expulsando a los sindicatos de la negociación colectiva y dejando únicamente en manos del empresario la modificación de las condiciones del trabajo. Una reforma ofensiva que atenta contra los derechos laborales, con una agresividad casi ni vista en el franquismo en el ámbito laboral.
El derecho universal de acceso a la sanidad es ya leyenda. Este Gobierno ha violado el principio de sanidad pública y universal introduciendo copagos farmacéuticos y lo más grave, expulsando a los inmigrantes del sistema sanitario. Una medida xenófoba, criminal y absolutamente retrógrada, de mentes ancladas en el clericalismo y en la España pasada. Su pretensión no es otra que entregar al negocio privado la salud de tod@s, si no que se lo digan a los madrileños o valencianos. Lógico parece, por ende, que se nieguen a eliminar las cuchillas de la valla de Melilla con el consecuente daño que causa a quienes la intentan cruzar en busca de una oportunidad en Europa.
En la primera de cambio fulminaron la Ley de Dependencia, una ley moderna, avanzada, reconocedora de derechos a un colectivo marginado y ninguneado desde el Franquismo, aquellos que por enfermedad necesitan depender de otras personas para desenvolverse en su día a día. El PP la ha desmantelado, retornando a la situación de antes; las mujeres en los hogares cuidando de los enfermos y mayores. Una realidad cruel, que se esconde bajo este aniquilamiento injustificado y doloroso que refleja sus convicciones morales.
Como no puede ser de otra manera, un régimen tiene consigo un manipulado, sesgado y limitado poder judicial. El Partido Popular ha subido las tasas judiciales a niveles históricos, para que antes de recurrir una sentencia o de acudir a la justicia, te lo plantees o directamente no puedas realizarlo, lo que se interpreta como una justicia para ricos, o lo que es lo mismo, para ellos. Otra de esas medidas, que sin consultar con nadie y con alevosía, aprueban, teniendo en su contra a todo el conjunto del poder judicial. También hemos visto, cómo los jueces que les molesta, acaban en la cárcel o inhabilitados. Veremos cómo acaba la investigación de Ruz, y él. Todo muy democrático.
Naturalmente, visto lo anterior, no les interesa que se siga conociendo las vergüenzas de sus antepasados en el Franquismo, por ello boicotean y se burlan de la Ley de Memoria Histórica. Su pensamiento sobre la recuperación y reparación de la memoria la encontramos directamente de boca del propio Rafael Hernando, quien afirmó que “algunos se han acordado de su padre cuando había subvenciones para encontrarlo”. Una miserable y desgraciada afirmación que resume lo que cree el PP de los muertos de la dictadura.
Aquello escrito en la Constitución sobre el derecho a la vivienda, nunca debieron entenderlo. Se han negado a paralizar los desahucios, teniendo enfrente al resto de partidos políticos, organizaciones y sociedad. No han tenido la dignidad de mover ficha para ponerse de lado del pueblo y alzar la voz contra sus cómplices banqueros ante esta inhumana actuación.
Con este dudoso gobierno democrático la brecha entre pobres y ricos se ha aumentado. Las diferencias sociales han crecido estrepitosamente. Esto ha traído consigo más pobreza al país, hasta niveles nunca vistos en democracia; pobreza infantil en el 26’7% y 3 millones de españoles en la pobreza absoluta. Para más inri se dedican en Ayuntamientos y Comunidades a multar y/o criminalizar a quienes no les queda otra que buscar en la calle y contenedores para sobrevivir. Además han rechazado en el Congreso la iniciativa de evitar que se le pueda cortar la luz a ninguna familia. Vuelve el hambre, como en aquellos tiempos, y se niegan a frenarla.

La censura a los medios no puede quedar eximida en el ideario de retrógrados dirigentes como los del Gobierno popular. Han creado una ‘Ley mordaza’ para los periodistas. Ahora las preguntas en rueda de prensa en Moncloa, son escogidas y encorsetadas previamente. Ya hemos visto al propio Presidente del Gobierno leer las respuestas sin ni siquiera dignarse al disimulo. Eso cuando responden, porque en declaraciones públicas en Génova no suelen aceptar preguntas. Además, el escándalo supremo ha sido el cierre de la primera televisión autonómica de España, de un feudo del PP, Radio Televisión Valenciana, tras haberla manipulado y quebrantado hasta niveles impensables.
Un Gobierno con tal ideario no puede creer de ninguna de las maneras en la ciencia, en el progreso, en la investigación. Un gobierno de un Estado que se presuponía avanzado, que no solo no apuesta sino que además recorta en I+D+I, deja ver su anticuada mentalidad y anhelo de regreso en el tiempo. No se concibe el futuro de la humanidad sin continuar invirtiendo en investigación, en desarrollo y en innovación que repercutirá en una mejora de nuestra calidad de vida y un progreso de toda la sociedad. El PP se opone.
Su guinda a este paulatino regreso a la España oscura y represora es su nueva contrarreforma del Aborto, que retrocede a España 50 años. Una ley que acaba con la libertad de decidir de las mujeres para volverlas a someter al dictado y decisión de otros. Su doble moralidad no tiene límites, nuevamente, las ricas se lo pagan y las pobres se desangran. Una reforma que supone el guiño más evidente a su electorado extremo y ultra católico, y que nuevamente nos deja fuera de Europa. Otro gesto derechista, sectario, donde ocurrirá lo mismo que en tiempos de Paco, las hijas de ellos a Londres o a clínicas que se pueden permitir. Esa doble moral de esta derecha rancia que nos Gobierna y está dejando ver su peor cara.
Para “más democracia”, nos hablan de una posible Ley de Servicios Mínimos, es decir, una ley de huelga encubierta. Porque nunca creyeron en la protesta, en el derecho de huelga de los trabajadores y de las clases menos pudientes. Visto todo lo anterior, temblad ante lo que nos puede deparar esta nueva odiosa propuesta, porque, aunque les cueste reconocerlo, tampoco creen en este derecho tal y como está concebido.
Como probablemente te indigne todo lo anterior, especialmente si eres una persona educada en valores cívicos, sociales, democráticos y de igualdad, es decir, absolutamente lo opuesto a la suya, te vas a manifestar. Qué sería de un régimen vigilado y controlado sin una represión ciudadana. También nos la han servido. El Gobierno elabora una Ley de represión a la antigua usanza, que limita derecho de manifestación y expresión y que sanciona y reprime al ciudadano. Una auténtica vergüenza que no tiene cabida, sentido ni razón de ser en una democracia. Pretenden introducir el miedo en la ciudadanía para que en lo último que piensen es en salir a manifestarse en defensa de esos derechos que también les han quitado. Una ley que podemos equiparar a la de vagos y maleantes o la de Orden Público del Franquismo. Recientemente hemos visto publicado en el BOE que el Ministerio de Interior adquiere por 400.000€ un camión con cañón de agua para dispersar manifestantes. Lo siguiente será vestir de gris a la policía.
Tampoco han creído jamás en el municipalismo ni en los Ayuntamientos como administración más próxima al ciudadano. Por ello en su nueva Ley de Reforma de las Administraciones reducen las competencias básicas de los municipios, entre ellas los Servicios Sociales, pieza fundamental en estos momentos en todos los consistorios. Querrían volver a sustituir los políticos por tecnócratas, porque les incomoda la figura del Alcalde electo. El propio contenido de la Ley no habla de ciudadanos sino que se refiere a éstos en terminología económica y mercantilista. Otro despropósito y atentado a la democracia. Su sentido de Estado sigue estructurado en el centralismo antidemocrático de la dictadura y su no apuesta por el municipalismo como administraciones más conectadas a la ciudadanía.
Su oposición abierta al matrimonio homosexual y a todo el colectivo LGTB en general es una evidencia manifiesta de su homofobia y clasismo. Se opusieron también a la Ley de Igualdad de Zapatero, puesto que nunca creyeron en ella, firme reflejo del machismo imperante en sus valores.
A todo lo desgranado anteriormente cabe sumarle el cierre de organismos como el Consejo de la Juventud de España, el fin a las ayudas a la emancipación de los jóvenes, los intentos antidemocráticos de reducir diputados en parlamentos autonómicos como medida caciquil para afianzarse en el poder. Las constantes privatizaciones de todo servicio público posible para favorecer a sus empresas y amigos, que juntos acaban dando sentido a “Gürteles”, “Brugales”, “Barcenas”..etc. Y como no, su poda ahora al sistema público de pensiones, del que tampoco creen.
En definitiva, bajo el discurso de la austeridad, nos desmontan, delante de nuestros ojos, nuestro sistema democrático y de bienestar, ideado para progresar y hacerlo mejorar. Están embaucando a la ciudadanía que a su vez asiste perpleja al desmantelamiento de las garantías, derechos y libertades que la sociedad española ha construido junto a gobiernos progresistas y que parecía que nunca se volverían atrás.
Se camuflan bajo términos que ni entienden. Tolerancia, libertad, respeto, democracia, todo ello maquillaje que de ninguna de las maneras se corresponde con sus acciones ni decisiones. Obras son labores y no amores.
Esta derecha no es europeísta ni moderna, como en la mayoría países europeos. Es una derecha conservadora anclada en los valores, creencias y pensamientos franquistas y ultra católicos. Donde su máxima es devolver a la mujer de donde nunca creen que debió marchar, del hogar. Además, desean volver a educar en los valores del catolicismo. Retornar a un país de clases, con oportunidades para las clases altas y miseria para las bajas. Un país donde los derechos no existan, las libertades vengan limitadas y la justicia esté corrompida. Y digo esto, deducido de todas y cada una de las decisiones arriba descritas. No lo pienso sin más, lo extraigo del espíritu de tanta retrógrada ley.
Todas ellas forman una sinvergonzonería inclasificable, un atentado directo a la ciudadanía de este país, un retraso sin precedente, una burla a la inteligencia de un pueblo progresista y en pro de la igualdad y que nos deja un claro aviso a todos; paremos a esta derecha que viene dispuesta a reventar nuestro sistema democrático, público, de bienestar y de derecho.
Fin de la cita
DIARIO PROGRESISTA.

domingo, 5 de enero de 2014

COPLILLAS



El recibo de la Luz



No quisiera exagerar

ni parecer andaluz,

pero me preocupa mucho

el recibo de la luz.



Si nos siguen machacando

con aumentos sucesivos,

será imposible pagar

el valor de los recibos.



Solamente tendrán luz

algunos privilegiados,

y los demás viviremos

como en los tiempos pasados.



Nos alumbrará el candil

con su aceite y su candela,

y en la mesita pondremos

la palmatoria y la vela.



No se podrá utilizar

la aspiradora ni el horno,

todos nuestros aparatos

los tendremos como adorno.



Si la vitro no funciona

y el microondas no va,

guisaremos en la lumbre

con la pereza que da.



Dado que la lavadora

sin corriente no trabaja,

habrá que lavar a mano

otra vez en la tornaja.



A la hora de planchar

pondremos mucha atención,

para no quemar las prendas

con la plancha de carbón.



Cogeremos resfriados

al salir al exterior,

con los cabellos mojados

por no tener secador.



Sin frigorífico en casa

todo será deprimente,

los alimentos podridos

y la cerveza caliente.



QuiÉn soportará el verano

cuando haga tanto calor,

sin aire acondicionado

ni un triste ventilador.



Sin ver la televisión

la vida será muy dura,

sin nuestras series tan buenas

y sin la telebasura.



Como locos estaremos

cuando la luz se haya ido,

las mujeres sin novela

y los hombres sin partido.



Sólo me gusta una cosa

de este maldito apagón,

si a la cama vamos antes

subirá la población.



Juan Santos Santos
jsantosbis@gmail.com


BACON DE INFANTES