sábado, 21 de septiembre de 2013

EL 0,25%


SÁBADO, 21 DE SEPTIEMBRE DE 2013

EUGENIA BOLAÑOS 

Es el factor de sostenibilidad de las pensiones de la seguridad social a partir de 2019, según la propuesta del Gobierno del PP. La Ministra Báñez juega con la inteligencia de todos nosotros. Según la Ministra más gris del Gobierno del Sr. Rajoy, este 0,25% destierra la congelación de las pensiones. Siempre habrá... un 0,25%.

Esta argumentación es perversa.

El artículo 50 de la Constitución Española de 1978 dice literalmente que “los poderes públicos garantizarán, mediante pensiones adecuadas y periódicamente actualizadas, la suficiencia económica a los ciudadanos de la tercera edad”.

 La reforma de las pensiones que propone el PP es un atentado a este precepto constitucional. Teóricamente, se trata de una reforma que no saldrá adelante por el veto del Tribunal Constitucional.

Si ya existen indicios claros de inconstitucionalidad, ¿por qué sigue adelante el PP con una propuesta que normativiza la precariedad de las pensiones? Y ¿por qué ahora que según el propio gobierno estamos saliendo de la crisis?

 Las cosas no cuadran.

El 0,25% es igual a una pérdida progresiva del poder adquisitivo.

En España partimos de unas pensiones mínimas que sólo permiten sobrevivir. Están muy lejos de garantizar una suficiencia económica.

 La propuesta de reforma del PP es una apuesta por el empobrecimiento de las personas perceptoras de prestaciones económicas del sistema de seguridad social y, para quienes lo puedan pagar, a favor de sistemas complementarios privados de pensiones.

 El deterioro de las relaciones sociales por causa de la crisis nos está llevando a la aceptación de mínimos “intolerables”.

El PP nos están proponiendo una vida activa basada en el subempleo y la temporalidad, La hiperflexibilización del mercado de trabajo nos obligará a estar entrando y saliendo del desempleo durante nuestra carrera profesional. Impidiéndonos la mejora progresiva de nuestras bases de cotización.

 Este panorama se cierne sobre nosotros de forma rotunda y no parece que vaya a cambiar en muchos años.

 El Gobierno del Sr. Rajoy, como si fuéramos niños, nos ha subido a un tobogán con caída libre. Muchos nos estamparemos contra la arena al final de la pendiente. Sin poder evitarlo.

 A mi juicio esta reforma es lo mismo que perpetuar un sistema de seguridad social de mínimos. Con una prestación garantizada, eso sí. Pero a todas luces insuficiente para hacer frente a los gastos inherentes a una vida digna ( en vivienda, salud, educación y servicios sociales de calidad).

 El PP quiere que nos acostumbremos a un copago generalizado. ¡Viva el estado liberal¡

DIARIO PROGRESISTA